LA PLATA, Febrero 14.-(Por Pepe Eliaschev) Más allá de la pirotecnia de acusaciones histéricas contra Julio Cobos, y de la risueña imputación de "golpismo" a
El caso de Luis D'Elía, un todo terreno que reporta a
"Es mentira que le haya dado un ultimátum al gobierno nacional" sobreactuó, a pocos días de viajar a Irán, invitado por el régimen de Teherán. Resultado: "Alicia Kirchner comprometió la voluntad de resolver de manera perentoria y adecuada las demandas sostenidas". Se juramentó a "sostener el actual gobierno nacional y popular encabezado por la presidenta Cristina Fernández, sometido a continuas maniobras destituyentes de la derecha oligárquica". Como si estas señales de "arreglo" no fueran suficientes, D'Elía agradeció la "enorme solidaridad recibida, en especial del compañero (el secretario de
ARREGLANDO
Pero 72 horas antes le había mojado fríamente la oreja al Gobierno: "lamentablemente este programa de empleo está vedado y hoy está siendo canalizado a través de las redes del Partido Justicialista y es una cosa que no podemos permitir".
Son señales inconfundibles y hay que registrarlas con prolijidad, como otras que se vienen dando. Militantes de Libres del Sur, el movimiento piquetero que fue durante años seguidor del gobierno de los Kirchner, acusan por ejemplo al gobierno municipal de Avellaneda de usar políticamente la mercadería destinada a planes sociales, para dárselos al Partido Justicialista. Los activistas de este grupo aseguran que la mercadería que les había sido asignada se usó para mantener "la estructura clientelar" del peronismo y acusan al ministro bonaerense de Desarrollo Social y ex intendente del distrito, Baldomero (Cacho) Alvarez de Olivera.
"Desde hace tres meses no contamos con mercadería por tener una actitud crítica a la estructura clientelar del PJ", acusaron, mientras que el gobernador Daniel Scioli replicó que lo quieren "tomar como rehén". Avellaneda es la base de Cacho Alvarez, varias veces intendente y jefe del peronismo de ese municipio. En defensa propia, desde la comuna respondió el secretario de Desarrollo Social del distrito, Carlos Fiorentino, quien acusó a Libres del Sur de "crear comedores comunitarios fantasmas". Para funcionarios de Avellaneda "hay comedores que figuran en los papeles, pero los mismos vecinos nos dicen que allí no se da de comer a nadie". Libres del Sur dice operar 400 comedores en el conurbano. Desde el Ministerio de Desarrollo Social bonaerense se corroboró que la tasa de mortalidad infantil creció en Avellaneda durante el último año de la gestión de Cacho Alvarez".
D'Elía había amenazado al gobierno que 80.000 "tipos" iban a salir a la calle. Dijo, concretamente: "si esto no cambia, en marzo van a haber 70.000/80.000 tipos saliendo a la calle a reclamar". Y lo redondeó con su reconocido desparpajo: "el que avisa no traiciona".
Tres días antes de "arreglar" con los Kirchner, D'Elía dijo por una de las numerosas radios que responden a los Kirchner que "en el Gobierno no nos escuchan, nos mienten" y que "estamos desbordados por nuestras bases".
Es que las protestas por los planes las venían liderando agrupamientos no kirchneristas, como el Frente Popular Darío Santillán,
D'Elía se desmarcó cuando advirtió esta semana que en su grupo manejador de planes "hoy las cosas no dan para más, estamos asfixiados, rebalsados, se cayeron 456.000 programas de empleo comunitario" y, por otro lado, "se impide el acceso al programa por cooperativas Argentina Trabaja y se está entregando mansamente toda esta estructura a un sistema político que en buena parte está urdiendo la traición a Néstor Kirchner".